Homilía Domingo de Resurrección 12 de Abril

Evangelio de hoy y lecturas

Primera lectura

Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 10, 34a. 37-43

En aquellos días, Pedro tomó la palabra y dijo:

«Vosotros conocéis lo que sucedió en toda Judea, comenzando por Galilea, después del bautismo que predicó Juan. Me refiero a Jesús de Nazaret, ungido por Dios con la fuerza del Espíritu Santo, que pasó haciendo el bien y curando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.

Nosotros somos testigos de todo lo que hizo en la tierra de los judíos y en Jerusalén. A este lo mataron, colgándolo de un madero. Pero Dios lo resucitó al tercer día y le concedió la gracia de manifestarse, no a todo el pueblo, sino a los testigos designados por Dios: a nosotros, que hemos comido y bebido con él después de su resurrección de entre los muertos.

Nos encargó predicar al pueblo, dando solemne testimonio de que Dios lo ha constituido juez de vivos y muertos. De él dan testimonio todos los profetas: que todos los que creen en él reciben, por su nombre, el perdón de los pecados».

Salmo

Sal 117, 1-2. 16-17. 22-23 R/. Este es el día que hizo el Señor: sea nuestra alegría y nuestro gozo

Dad gracias al Señor porque es bueno,
porque es eterna su misericordia.
Diga la casa de Israel:
eterna es su misericordia. R/.

«La diestra del Señor es poderosa,
la diestra del Señor es excelsa».
No he de morir, viviré
para contar las hazañas del Señor. R/.

La piedra que desecharon los arquitectos
es ahora la piedra angular.
Es el Señor quien lo ha hecho,
ha sido un milagro patente. R/.

Segunda lectura

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Colosenses 3, 1-4

Hermanos:

Si habéis resucitado con Cristo, buscad los bienes de allá arriba, donde Cristo está sentado a la derecha de Dios; aspirad a los bienes de arriba, no a los de la tierra.

Porque habéis muerto; y vuestra vida está con Cristo escondida en Dios. Cuando aparezca Cristo, vida vuestra, entonces también vosotros apareceréis gloriosos, juntamente con él.

Evangelio del día

Lectura del santo evangelio según san Juan 20, 1-9

El primer día de la semana, María la Magdalena fue al sepulcro al amanecer, cuando aún estaba oscuro, y vio la losa quitada del sepulcro.

Echó a correr y fue donde estaban Simón Pedro y el otro discípulo, a quien Jesús amaba, y les dijo:

«Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto».

Salieron Pedro y el otro discípulo camino del sepulcro. Los dos corrían juntos, pero el otro discípulo corría más que Pedro; se adelantó y llegó primero al sepulcro; e, inclinándose, vio los lienzos tendidos; pero no entró.

Llegó también Simón Pedro detrás de él y entró en el sepulcro: vio los lienzos tendidos y el sudario con que le habían cubierto la cabeza, no con los lienzos, sino enrollado en un sitio aparte.

Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado primero al sepulcro; vio y creyó.

Pues hasta entonces no habían entendido la Escritura: que él había de resucitar de entre los muertos.

Reflexión del Evangelio de Hoy

El Testimonio de Pedro Y Conseguir la Vida Eterna

Queridos hermanos, hermanas en esta primera lectura de los hechos de los apóstoles nos muestra que Pedro da testimonio de Cristo ante la familia de Cornelio que es de origen pagana, dio testimonio sobre lo que sucedió en la vida, muerte y resurrección de nuestro Señor Jesucristo, Pedro en ese tiempo todavía tenía tendencias Judías de lo cual lo tenía presente en su vida, sin darse cuenta él ya es un cristiano porque le dio la potestad Cristo para que sea el primer Papa de la historia de la iglesia católica.

Pedro en ese tiempo tenía muchas complicaciones porque los paganos querían convertirse al cristianismo pero como todavía tenían raíces judías la  circuncisión es un gran requisito, pues fue un gran obstáculo para la conversión al cristianismo de aquella gente pagana, entonces los apóstoles que es el Judío Cristianismo rompe ese requisito que con solo bautizarse seguirle fiel a Cristo y tenerle fe es más es suficiente para hacerse un cristiano.

Entonces los paganos se convertían y se adjuntaban a las primeras comunidades cristianas católicas, Pedro tuvo una arduo labor de convertir aquella gente del judaísmo al cristianismo y de paganismo a cristianismo, ahora en el mundo actual cuantos se están convirtiendo al cristianismo seamos pues así como Pedro para que llegar a la verdadera conversión a las personas y  que sean cristianos católicos auténticos. 

Muchos de nosotros nos hacemos esta pregunta ¿Cómo ser un cristiano católico autentico? Pues la respuesta es muy sencilla como ya lo menciono en esta segunda lectura del apóstol San Pablo a los Colosenses en no aspirar lo vienes terrenales, sino aspirar lo vienes de arriba pero ¿Qué significa esto? muchos de nosotros nos olvidamos de practicar nuestra conversión vivimos atados del pecado que nos da este mundo como bandeja, perdemos su gracia que es nos regala que es la santidad porque para Dios todos somos importante bien decía nuestro querido el Papa Francisco “ Al llamaros, Dios os dice: “Tú eres importante para mí, te quiero, cuento contigo”. Jesús, a cada uno de nosotros, nos dice esto. De ahí nace la alegría. La alegría del momento en que Jesús me ha mirado. Comprender y sentir esto es el secreto de nuestra alegría. Y la alegría del encuentro con Él y de su llamada lleva a no cerrarse, sino a abrirse; lleva al servicio en la iglesia”.

Qué importancia es para la vida de un cristiano estar con la fe bien puesta pero sin olvidar que las obras es necesaria como hacer obras de misericordia, que implica la fe en creer como alimentarse pues con la oración, la meditación, participar de la santa misa, confesarse es por eso que el apóstol nos recuerda en Santiago,19-22 - "¿Tú crees que existe un solo Dios? Haces bien; pero también los demonios creen y se estremecen. ¿Por qué no te enteras de una vez, pobre hombre, de que la fe sin obras es estéril? ¿Acaso obtuvo Abraham, nuestro antepasado, la salvación de Dios por sus obras, cuando ofreció a su hijo Isaac sobre el altar? ¿Ves cómo la fe cooperaba con sus obras y por las obras se hizo perfecta su fe?"

El Señor ha Resucitado

Queridos hermanos y hermanas de nuestro Señor Jesucristo de nuestra Madre Santísima la Virgen María en este hermoso evangelio según San Juan nos muestra que hoy la Iglesia celebra el día más grande de la historia, porque con la resurrección de Jesús se abre una nueva historia, una nueva esperanza para todos los hombres. Si bien es verdad que la muerte de Jesús es el comienzo, porque su muerte es redentora, la resurrección muestra lo que el Calvario significa; así, la Pascua cristiana adelanta nuestro destino. De la misma manera, nuestra muerte también es el comienzo de algo nuevo, que se revela en nuestra propia resurrección. 

El primer día de la semana que es domingo, fue María Magdalena a poner hierbas a nuestro Señor porque es de costumbre Judía se dio con la gran sorpresa que el cuerpo no estaba en la tumba corrió a dar la noticia a sus apóstoles, entonces Pedro y Juan se echaron a correr a ver la tumba de que estaba vacía, entonces como Juan como era más joven corría rápido y Pedro por su edad corría lento, antes de entrar al sepulcro Juan se detuvo se quedó afuera esperándolo porque Pedro es el que encabeza el que tiene la autoridad mayor entonces entraron y se acordaron de lo que le dijo el maestro nuestro Señor que él iba a resucitar al tercer día.

Nuestro Señor ha vencido a la muerte, a vencido al enemigo para que no tengamos atados por el pecado, nos ha liberado con su resurrección a darnos vida después de la muerte, a inaugurado el cielo prometido pero para eso nosotros tenemos que ganárnoslos con nuestra fe, con nuestras obras que son de misericordia, para todo católico cristiano es una pascua que es el paso de la muerte a la vida como bien decía esta carta de 1 Pedro 1:3 “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, quien según su gran misericordia, nos ha hecho nacer de nuevo a una esperanza viva, mediante la resurrección de Jesucristo de entre los muertos” .

Es por eso que debemos tener la fe en la resurrección de nuestro Señor pero sino resucito entonces como dice San Pablo en de sus cartas  1 Corintios 15:14 “Y si Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra predicación, vana es también vuestra fe” esa fe es un don una gracia que nuestro Señor nos dio de lo cual estamos convencidos que el Señor Jesucristo ha resucitado y lo ha hecho todo esto por amor así como lo demuestra el evangelista  Juan 3:16-17  “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en Él, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque Dios no envió a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por Él”.

Nuestros pecados, hasta la propia muerte Cristo lo venció por su resurrección ahora nos toca a poner de nuestra parte, que no sea en vano la muerte de Jesucristo como si a uno no le importara, no tiene esa sincera conversión, no practica la santidad, porque eres el responsable de tu propia alma a la condenación, porque si amamos a Cristo resucitado pues corremos por nuestra alma a la liberación que es la felicidad completa a estar con Él en el cielo con nuestros cuerpos gloriosos de lo cual debemos tener presentes lo que es la palabra Cristiano como bien decía nuestro querido el Papa Francisco “Ser cristianos significa no partir de la muerte, sino del amor de Dios por nosotros, que ha derrotado a nuestra acérrima enemiga. Dios es más grande de la nada, y basta sólo una luz encendida para vencer la más oscura de las noches. Pablo grita, evocando a los profetas: «¿Dónde está, muerte, tu victoria? ¿Dónde está tu aguijón?» (v. 55). En estos días de Pascua, llevemos este grito en el corazón. Y si nos dirán del porqué de nuestra sonrisa donada y de nuestro paciente compartir, entonces podremos responder que Jesús está todavía aquí, que continúa estando vivo entre nosotros, que Jesús está aquí, en la Plaza, con nosotros: vivo y resucitado”.

Pongámonos pues bien a los pies de Jesús a  los pies de María pides mola nuestra Madre de la alegría en festejar que su Hijo ha resucitado nos motive a hacer cada día mejores cristianos y como no en ser santos que este domingo intercedas por cada uno de nosotros.

Paz y bien hermanos, hermanas.