"TU ERES PEDRO Y SOBRE ESTA PIEDRA EDIFICARE MI IGLESIA." Mt. 16, 13:20

domingo, 19 de octubre de 2025

La Hipocresía en su Máxima Expresión

 



Muy buenos días con todos estuve en una reunión como hermano católico me preguntaron ¿Un político cuestionado puede ponerse el hábito morado y puede cargar al Señor de los Milagros?

Le conteste en este momento tenemos un presidente que está investigando por actos de corrupción, además a cometido una violación a una mujer según los informes que he visto, porque no se le puede deliberar de esta manera antes de ser informado, pero centrémonos más a lo que concierne a lo que es de Dios y la iglesia católica nos dice.

Cuando uno se pone el hábito del Señor de los Milagros no cualquiera se lo puede poner por una sencilla razón porque representa la responsabilidad de tener una coherencia de fe tanto en su conducta como lo que expresa, pero en este caso este presidente no debió hacerlo sabiendo que ha cometido estos actos delinquidos, pero como máxima autoridad obligadamente tiene que hacerlo no por amor a Cristo sino por ser autoridad por cumplimiento cumplo ante el Señor pero a la vez le miento, he aquí la historia porque el hábito morado. “Cuenta la historia que una noche, doña Antonia se encontraba rezando y vio a Cristo con una túnica de color morado, llevando una soga en el cuello y una corona de espinas en la cabeza. De acuerdo al relato, escuchó una voz, la cual le indicó que esa vestimenta fue entregada para ser usada por otras almas. “Yo te doy mi traje con el que anduve por el mundo. Estímalo, porque a nadie le he entregado mi santa túnica”.

Seria una falta de respeto ante el Señor que uno que cometió actos ilícitos cuestionables y se pusiera el habito como cargar el anda del Señor de los Milagros.

Me preguntaron ¿Pero aquellos hermanos de la cuadrilla se ponen el habito y son pecadores? Le conteste todos somos pecadores el que dice que no se engaña así mismo pero un pecador se arrepiente mientras un corrupto no que comete actos ilícitos no incluso tiene el descaro de negárselo así mismo y a los demás. Veremos pues lo que dijo el Papa Francisco en aquel tiempo “En el pasaje del Evangelio hay otro episodio en el cual, destacó el Obispo de Roma, Jesús dice: «¡Ay de quien provoca escándalos!». Jesús, explicó, «no habla del pecado sino del escándalo», y dice: «Al que escandaliza a uno de estos pequeños, más le valdría que le ataran al cuello una piedra de molino y lo arrojasen al mar. Tened cuidado». El Pontífice se preguntó: «¿Pero qué diferencia hay entre pecar y escandalizar? ¿Qué diferencia hay entre pecar y hacer algo que provoca escándalo y hace mal, mucho mal?». La diferencia, dijo, es que «quien peca y se arrepiente pide perdón, se siente débil, se siente hijo de Dios, se humilla y pide la salvación de Jesús. Pero quien provoca escándalo no se arrepiente y sigue pecando fingiendo ser cristiano». Es como si condujera «una doble vida» y, agregó, «la doble vida de un cristiano hace mucho mal».

 

Al respecto, el Pontífice recordó como ejemplo a quien mete la mano en el bolsillo y hace ver que ayuda a la Iglesia mientras que con la otra roba «al Estado, a los pobres». Este «es un injusto» para quien hubiera sido mejor —«y no lo digo yo sino Jesús», subrayó el Papa— que le pusieran una piedra de molino y lo tirasen al mar. No se habla aquí de perdón, «porque esta persona engaña», dijo el Papa haciendo luego referencia a la primera lectura, tomada del libro de la Sabiduría (1, 1-7), donde se lee: «El espíritu educador y santo huye del engaño, se aleja de los pensamientos necios y es ahuyentado cuando llega la injusticia» (v. 5).

 

«Donde hay engaño —comentó el Papa Francisco— no está el Espíritu de Dios. Ésta es la diferencia entre pecador y corrupto. Quien hace una doble vida es un corrupto. Quien peca, en cambio, quisiera no pecar, pero es débil y se encuentra en una condición en la que no puede encontrar una solución, pero va al Señor y pide perdón. A éste el Señor le quiere, le acompaña, está con él. Y nosotros debemos decir, todos nosotros que estamos aquí: pecadores sí, corruptos no». Los corruptos, explicó una vez más el Papa, no saben lo que es la humildad. Jesús los compara con los sepulcros blanqueados: bellos por fuera, pero por dentro están llenos de huesos putrescentes. «Y un cristiano que presume de ser cristiano, pero no vive como cristiano —destacó— es un corrupto».

En pocas palabras les seguí comentando cuando un político que delinque y tiene la osadía de ponerse el habito y carga al Señor de los Milagros es un hipócrita porque no vive de acuerdo a su coherencia de fe, solo los pecadores si tiene ese derecho porque en sus corazones saben que son débiles, son humildes y se arrepiente un corrupto y a la vez se niega reconocerlo y miente a los demás eso se llama fariseísmo también.

Mateo 23

Jesús condena a los hipócritas

La palabra hipócrita proviene de un vocablo griego que significa “actor” y se aplica a la persona que finge cualidades o sentimientos contrarios a los que verdaderamente tiene o experimenta. Una persona hipócrita es la que finge ser lo que no es a fin de recibir reconocimiento o ganancia. La hipocresía es el resultado del orgullo. Los humildes seguidores de Dios procuran vivir de acuerdo con Sus leyes porque aman a Dios y a sus semejantes, y no porque recibirán reconocimiento y honores por ello. Cuando a una persona que es humilde seguidora de Dios se le hace notar que está equivocada o haciendo algo indebido, esa persona de inmediato se esfuerza por rectificar su proceder. La persona hipócrita busca encubrir sus pecados y justificarse por ellos.

A lo largo de lo que has estudiado del libro de Mateo has leído de la hipocresía de los líderes judíos de la época de Jesús y de la forma en que Jesús enseñó a Sus creyentes a vivir el Evangelio sin hipocresía. Mateo 23 contiene el último testimonio de Jesús y la forma en que condenó a los que rechazaban Sus enseñanzas y testimonios del Evangelio verdadero y del plan de felicidad eterna.

Cuando leas, ten en cuenta lo que pensarías de este sermón si hubieras sido fariseo y lo hubieses oído en persona, ¿o lo que habrías pensado si hubieras estado allí en aquellos días procurando decidir si debías continuar siguiendo a los fariseos o seguir a Jesús?

Escrito por: 

Omar García Calderón.

Predicador Católico.




Share:

Botones

Vistas a la página totales

Buscar este blog

About me

Mi foto
Ser mejores cristianos y con las ganas de que aprendan la fe católica.

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Powered By Blogger

Translate

Etiquetas

Blog Archive

Theme Support

5/Business/slider-tag